Cantidad de tarta que me he comido (gráfico autoreferente)

viernes, 19 de septiembre de 2008

FRACTALIDAD EN LAS "RACHAS"

No soy un experto en estadística, ni pretendo serlo. Sin embargo, entiendo de manera muy intuitiva que en todo fenómeno con una cierta componente aleatoria, como es este maravilloso juego que comparto con todos los que me leéis (sí, sí, todos vosotros, los tres), puede haber un cierto grado de agrupación de resultados, ya sean positivos o negativos. Le podemos llamar rachas de suerte, pero es algo con un firme fundamento matemático.

Centrémonos ahora en una sesión particular. Si en esta sesión jugamos un suficiente número de manos, observaremos que nuestro resultado irá fluctuando en general hacia arriba y hacia abajo, en función de la suerte que tengamos con las cartas. Por tanto, el resultado de una sesión estándar podría ser algo parecido a una sinusoide un tanto irregular.

Pongámonos ahora en el caso de un mes jugando al póquer. Este mes estará compuesto de diversas sesiones con sus curvas sinusoidales, dando como resultado en el mes una nueva curva sinusoidal más amplia. Digamos que habrá habido ciertas sesiones que, dentro de su sinusoide, habrán dado un resultado netamente positivo y, por el contrario, habrá habido otras sesiones con un resultado negativo, dando lugar a esta nueva sinusoide mensual. Una sinusoide de sesión que haya tenido un resultado negativo, puede perfectamente pertenecer a un tramo de caída de la sinusoide mensual. Espero que me hayáis seguido hasta aquí.

Ahora, nos alejamos más de la gráfica que estamos dibujando y nos vamos, por ejemplo, al resultado de un año entero. La curva de este año tendrá también un aspecto sinusoidal y estará formada por varias sinusoides más pequeñas, que son las mensuales, las cuales, a su vez, están formadas por muchas sinusoides minúsculas, que son las sesiones. Como veis, esto no son más que una serie de fractales (supe de ellos por primera vez, como muchos, leyendo "Parque Jurásico"). Así, una sinusoide mensual que haya dado un resultado neto negativo, puede formar parte de un tramo descendente de la sinusoide anual. Pero, según muchos autores, podemos estar tranquilos porque, si somos buenos en esto (o, al menos, si jugamos en general contra gente peor que nosotros), tarde o temprano llegará el tramo ascendente y nos situaremos en el lugar en que debemos estar.

Pero yo tengo una teoría. Creo que los fractales no se detienen aquí. Hay más niveles. Y puede ser que un año malo no sea más que un pequeño fragmento de un tramo descendente de una curva mucho mayor. Esta sería una curva que cubriría toda tu vida jugando a esto. Y, dependiendo de si esta curva "vital" se encuentra en un tramo ascendente o descendente de la curva del siguiente nivel, así serán tus resultados esperados en el póquer en toda tu carrera. Creo que personas como Negreanou, Hansen, Vaswani o Luske tienen la suerte de estar en un tramo ascendente de la curva, llamémosle, "superior". Otras personas, de las que nunca conoceremos sus nombres, pero que aparecen a veces en algún documental sobre ludopatía o similares con un rectángulo negro ocultándoles los ojos, se encuentran, para su desgracia, en un tramo descendente. Yo, para bien o para mal, creo estar en un tramo más o menos plano, y tengo la esperanza de que sea un valle (si no, no seguiría jugando, je, je).

Claro que los que no estamos en un tramo ascendente siempre podemos esperar a que lleguemos a él, pero, ¿y si ese tramo no llega hasta dentro de 50 años, para qué quiero la pasta entonces que ya habré terminado de pagar mi hipoteca?

domingo, 10 de agosto de 2008

SOBRE LAS POSIBLES "TRAMPAS" DE LAS SALAS

Esta es una teoría que siempre he tenido y que cada vez que recibo una dosis sospechosamente alta de bad-beats increíbles, vuelvo a pensar en ella (y, ojo, que hablo de bad-beats reales y no resultados de mal juego, que muchos fishes confunden con bad-beats).

Sólo hay que analizar qué es lo que le interesa a la sala en cuestión: la pasta. Y, ¿cómo la consigue?: a base de rakes. Y, ¿cómo puede aumentar los rakes?: asegurándose muchos jugadores. Pero, teóricamente, en un escenario normal, de todos los jugadores que hay, la inmensa mayoría son perdedores y alimentan las bancas de la minoría restante. Y de esa inmensa mayoría, sólo unos pocos se pueden permitir el lujo de seguir jugando y perdiendo. Todos los demás terminan arruinándose o abandonando el juego. Y eso es un grave problema para la sala. El único modo que tiene de evitar que esto ocurra es asegurándose que los grandes perdedores ganen de vez en cuando y no abandonen. Y creo que esto no es demasiado difícil. Tan sólo tienen que ser capaces de identificar a los grandes perdedores (lo cual es sencillo con programas estadísticos) y hacerles un seguimiento, que puede estar automatizado, de tal modo que, de vez en cuando, les aparezca en el turn o en el river esa carta que necesitan y que hace bueno el lamentable par de cartas con el que han hecho call a esas subidas que hacemos los demás.

Algo para pensar. Existen los medios. No es fácilmente detectable. Beneficia a la sala. Se puede hacer. ¿Por qué no lo iban a hacer? Qué diablos, yo lo haría.

viernes, 20 de junio de 2008

POQUER-RED 200$ AÑADIDOS - EMULANDO A PHIL HELLMUTH

Tras un prolongado paréntesis semiautístico (en el que, naturalmente, no he dejado de jugar, pero, con poco tiempo libre, tampoco he jugado mucho), retomo mi blog, por si alguien tiene a bien leerme de vez en cuando (y para ver si le saco algún provecho económico al banner que me acabo de poner, aunque, según recientes confesiones de Santi Torres, cuyo blog es infinitamente más popular que el mío, el beneficio que se puede llegar a sacar con este sistema es poco más que simbólico).

El caso es que el miércoles me ha sucedido algo que me ha parecido curioso y me ha alegrado el día. Paso a relatarlo.

Me confieso fiel seguidor de Poquer-red y un día vi anunciado un torneo para foreros en PokerStars. El torneo iba a celebrarse el miércoles 18 a las 22:00, con 10$+1$ de inscripción y 200$ añadidos. La verdad es que prometía ser interesante: un cierto overlay, pocos jugadores esperados, todos hispanoparlantes, varios seguramente conocidos y una estructura bastante agradable, sobre todo después de las turbo-orgías a las que nos está acostumbrando PokerStars con sus Giveaways y sus "Enséñame a Jugar".

Esta semana, como casi todas, me pasé más de la mitad de la misma en viaje de trabajo en Huelva, pero ello no iba a impedirme jugar el torneo en mi hotel (tengo módem de empresa :P).

Al fin, llegó el miércoles y, después de mi turbo-ración de las 19:35 con el heredero del "Enséñame a Jugar", el "Telecinco 2 Barcelona EPT", me lié a ver el intrascendental pero finalmente emocionante partido con Grecia. Acabó el encuentro a eso de las 22:35 y me puse a hacer zapping. Ante la habitualmente escasa oferta televisiva, decidí echar unas manos de cash. Cuál no fue mi sorpresa al abrirse automáticamente una mesa de torneo en la que me encontraba sentado. ¡Se me había olvidado! Tras unos momentos jurando en arameo, decidí ver si aún se podía salvar algún mueble. Faltaban como cinco minutos para el primer descanso, por lo que estábamos en el cuarto nivel con 100 puntos de ciega grande. Me quedaban como 900 puntos de los 1.500 iniciales. Y quedábamos en pie 38 de los 52 jugadores iniciales. Tras el descanso, empecé a remontar poco a poco y, sin llegar a estar nunca claramente por encima de la media, terminé mi participación a eso de la 1:15 en un más que sorprendente tercer puesto, llevándome 108$ como 108 soles.

En la mesa final no pude evitar comentarlo con mis compañeros oponentes y el maestro Raynor, que por allí estaba también, me comentó que a él le había sucedido lo mismo. ¡Bien por ambos! Inmediatamente nos comparé con Hellmuth, que a menudo llega tarde a los torneos y se da sus paseos de gloria durante los primeros niveles, poniéndose a jugar con el torneo ya avanzado. Y suele hacer un gran papel.

De todo esto, obviamente, no quiero, ni muchísimo menos, extraer la peregrina conclusión de que los primeros niveles no sirven para nada y lo que decide un torneo es lo que sucede después. Es cierto que por mucho que te llenes de fichas durante los primeros niveles, unas pocas malas manos en niveles avanzados te pueden dejar seco y, por el contrario, por muy mal que hayas salido de los primeros niveles, unas pocas manos geniales más adelante te pueden situar en cabeza. Sin embargo, los primeros niveles te sirven para aclimatarte, para conocer a los contrincantes y para ponerles a prueba metiendo acción arriesgando relativamente pocas fichas. Además, no me gusta infravalorar los stacks pequeños. Estoy convencido de que hasta la última ficha puede ser muy importante en un torneo, por lo que cualquier mínima apuesta ganada o perdida en las primeras fases de un torneo puede tener su importancia más adelante.

Es por todo esto que no me gusta perderme ni una sola mano de un torneo y me frustra mucho que ocurra, ya sea por despiste mío, por distracciones externas o por fallos técnicos.

lunes, 5 de mayo de 2008

WSOP MILLION DOLLAR GIVEAWAY

Aunque juego más bien poco, estoy procurando estar al loro de cualquier promoción que sea baratita (o gratis total). De este modo me enteré del WSOP Million Dollar Giveaway de Poker Stars. Para quien no lo sepa, se trata de una serie de freerolls que darán hasta 80 entradas al Main Event de las WSOP. Durante diez semanas habrá cada hora un freeroll turbo de 5.000 jugadores máximo, en el que los 50 primeros clasificados pasarán a una de las tres finales semanales que se juegan cada sábado (a elegir). En una de estas finales (la más madrugadora) sólo obtendrá el paquete premio un jugador y en las otras, tres jugadores. La limitación más importante es que cada jugador sólo tiene derecho a jugar un freeroll por semana. Por tanto, hay que escoger bien el día y la hora.

He podido comprobar que al principio de la semana hay muchos jugadores (prácticamente, se llenan todos los freerolls), pero, a medida que va avanzando la semana, la participación va disminuyendo. También se nota variación en función de las horas. De manera que parece que el viernes a las 10:05 de la mañana, hora española, es el mejor momento para jugar. Como en ese momento se supone que estoy trabajando, me he dedicado a jugar el sábado en el de las 11:05, 12:05 ó 13:05 (hay que dormir).

El caso es que este sábado logré clasificarme para una final semanal. Había algo más de 1.000 participantes (no era el momento óptimo, ya que puede haber sólo unos 700) y logré terminar entre los 50 primeros. La verdad es que fue un poco milagroso. En cierto momento, llegué a estar sólo con 92 fichas, cuando las ciegas eran 1.500/3.000 y sólo el ante ya eran 300. Sin embargo, mi T7o sobrevivió. Y yo sobreviví las 16 manos que aún duró el torneo. Tengo más que comprobado que la paciencia en esto da sus frutos.

Por la tarde, jugué una de las finales semanales. Nos juntamos 1.670 aspirantes y sólo podían pasar 3. Sin embargo, presenté batalla. La estructura no estaba mal. Niveles de 15 minutos, empezando por 10/20, con 5.000 fichas iniciales. No tuve ninguna mano especialmente brillante, pero me conseguí mantener durante gran parte del torneo (más de dos horas y nueve niveles) en unos relativamente cómodos 30 BB. Luego llegó la mano demoladora en la que mis Jotas fueron noqueadas por un AQo cuando salió una Reina en el flop. Ahí perdí casi la mitad de mi stack y me tuve que mantener después como pude en una M de alrededor de 5. Aún así, aguanté casi una hora y media más y cinco niveles, hasta que mis Ochos cayeron ante un set de Dieces, terminando en una más que respetable 154ª posición.

En fin, otra vez será. Quedan más oportunidades y siempre habrá más promociones similares.

martes, 19 de febrero de 2008

MI AVENTURA EN EL $2MM TT DE PS

Después de bastante tiempo sin contar nada de mí, contaré a quien pueda interesar mi positiva experiencia en el Torneo especial de Poker Stars de este finde, denominado $2MM TT. Para quien no lo sepa, ha sido un torneo turbo de 10.000 FPP's de inscripción y que repartía un premio total de 2 millones.

A lo largo de mis tres años jugando en PS, aunque he jugado relativamente poco, he logrado acumular más de 7.000 FPP's. No eran suficientes, pero también se podía ganar plaza jugando cualquiera de los innumerables clasificatorios que iban desde 10 hasta 2.500 puntos.

El viernes por la tarde, ya liberado de mis obligaciones laborales, jugué hasta 8 torneos (4 simultáneos), gastando más de 3.000 puntos. Llegué a quedar 2º en uno de entrada directa de 500 puntos y 20 participantes.

El sábado por la mañana, jugué otros 8, esta vez algo más "baratos" y no más de tres simultáneos, gastando otros mil y pico puntos. En esta ocasión, logré quedar 1º en uno de 250 puntos y 10 jugadores que daba dos plazas para un clasificatorio de 1.250 puntos que tendría lugar esa tarde.

Por la tarde jugué este clasificatorio, en el que participaban 815 jugadores y se clasificaban 101. Jugué bastante bien, "surfeando", como dice mi ex-cuñado Mortensen, a lo largo de los rapidísimos niveles, quedando en posición 21 y obteniendo mi plaza para el evento principal. Pasé el resto del sábado de relax.

El domingo por la tarde, un par de horas antes del evento, decidí echar unas manos de cash en mi nivel actual, NL25, donde llevo varios meses de crisis, planteándome regresar a NL10 y meditar sobre mis pecados. Pero la racha (si es que es racha) continuaba y gané casi 80$ en unas 200 manos, dándome un considerable respiro en mi bankroll de cash.

Por fin, dio comienzo el evento. Finalmente, se juntaron 9.600 jugadores, y recibían premio 4.000 (el más bajo, 180$). Jugué bien, pero las cartas no me acompañaron. Uno de mis mayores palos ocurrió cuando intenté robar en Button con T7o. Me lo vio el SB. Cuando vi en el flop T7K rainbow me las prometí muy felices. Ante el check del villano, metí medio bote, a lo que aquél respondió con all-in. Lo vi de inmediato (además, casi le doblaba en fchas) y mostró JJ. Desgraciadamente, se dobló la K en el turn y sus dobles me superaron, dejándome bastante tocado y con las ciegas mordiéndome el trasero. Cuando aún quedábamos más de 6.000 jugadores estaba casi muerto, pero ante la rapidez en la disminución del nº de jugadores, decidí aguantar para conseguir mis 180$. Un par de ases me dieron un último empujón para alcanzar esa posición. El siguiente nivel de cobro era a los 2.000 jugadores y yo era BB, con 675 fichas, cuando la BB eran 600, así que hice all-in con T8o. Me salió una escalera, si no recuerdo mal, llevándome más de 3.000 fichas. Un par de manos después, entré en un all-in múltiple con unos dieces ganadores, plantándome en más de 14.000 fichas, cuando la media estaba en 9.000. El caso es que, a lo tonto, a lo tonto, terminé el 656, llevándome unos reparadores 450$.

En definitiva, me lo pasé muy bien, jugué de maravilla y me demostré que esto sigue siendo lo mío en un momento de mi experiencia poqueril en que realmente lo necesitaba. Sé que un pelotazo está cerca y puede llegar en cualquier momento, cuando menos me lo espere.
Gracias por leerme y por dejarme compartir esta bonita, y casi inesperada, experencia.